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25.6.10

Un año más en Lourdes

Del 28 al 31 de mayo tuvo lugar la Peregrinación Diocesana a Lourdes 2010.
El viaje se realizó sin problemas mayores, y la llegada aunque se hace escalonada, siempre resulta un poco estresante ya que en poco tiempo hay que ubicar a los casi 300 enfermos en sus correspondientes habitaciones y además este año hemos contado con cuarenta excelentes voluntarios nuevos, de edades bastante jóvenes, que al principio estában un poco despistados, como siempre ocurre, pero todo salió bien.


Todo comenzó con el acto de Presentación en Santa Bernardette, que se inició con una procesión encabezada por el estandarte y una pancarta que rezaba MIRANDO A JESÚS CON LOS OJOS DE MARIA, lema de la Diócesis para esta peregrinación.

Este año presidió la ceremonia el nuevo Obispo de la Diócesis, D. José Ignacio Munilla, acompañado por uno de los Vicarios, Joseba González.
Nos saludo a todos pero en especial a los enfermos y comentó que aún cuando había estado muchas veces en Lourdes, esta era la primera vez que acudía como Pastor de la Iglesia de Gipuzkoa. Desde la Hospitalidad se le dio un abrazo de bienvenida.

El Sábado celebramos el Día de Gipuzkoa con asistencia de cientos de fieles de nuestra provincia. La eucaristía se celebró en la Gruta, uno de los actos emblemáticos de la Peregrinación.

La homilía la pronunció el Sr. Obispo, (si alguien tiene interés en leerla, esta en la Web del Obispado). Numerosos sacerdotes de la Diócesis que se acercan a Lourdes este día, concelebraron con él la Eucaristía. Cantó el coro de San Sebastián Mártir del Antiguo, a quien agradecemos sus atenciones y en particular la fiesta que nos ofreció después de la comida en el Accueil.

Los días pasados en Lourdes han sido hermosos y llenos de amor fraternal. Desde el paso por las piscinas hasta la procesión eucarística; la misa de peregrinos, la procesión de las antorchas, la misa internacional, la de los niños, los actos lúdicos, y finalmente la despedida.

Han sido cuatro días en los que hemos acabado cansados de verdad, pero renovado el espíritu, felices y llenos de alegría e ilusión.

La despedida de los autobuses como siempre muy emotiva, muchos de los chavales lloran, se abrazan y prometen escribirse, llamarse por teléfono…., todos mas o menos terminamos la peregrinación con el corazón blandito, y con muchas ganas de repetir. Pero.. ¡Ya queda menos para el 2011!

Como sabéis, en la revista “La Hospitalidad” se publicará un amplio reportaje de esta Peregrinación.

Podéis ver un álbum de fotografías de la Peregrinación 2010 pinchando en el enlace de la columna de la derecha.